ESTUDIO MARTA LABRADOR

Bajo un suelo de hormigón y cemento se esconde un pequeño oasis diseñado para recibir a todo aquel que le apetezca deleitarse con el máximo diseño de piezas de mobiliario, obras pictóricas e interiorismo.

Estudio Marta Labrador inaugura un espacio con carácter anglosajón, dónde no solo se presentan proyectos integrales de interiorismo, sino que también se abre una plataforma construida en un espacio abierto con contenidos artísticos y con mucho diseño.

Nuevo estudio para nuevas sensaciones

El nuevo estudio de Marta labrador se adentra en el interior de una fábrica. Una entrada con una propuesta paisajística te dirige hacia el final de un pasillo exterior que finaliza en un pórtico de hierro y madera dando la bienvenida al visitante a un portón de tres metros de altura de madera de iroko. Una puerta diseñada con reminiscencias de un proyecto anterior basado en la rehabilitación del Palacio Real, obra que realizó Artemade & Gemar en el año 2010.

Al entrar al estudio las sensaciones que el visitante puede experimentar tienen mucho que ver con la calma, la naturaleza y una paleta de color bien elegido. Nada tiene que ver con la idea preconcebida de lo que es una fábrica. Casi como si fuera un oasis un estudio de interiorismo, diseño y mucho arte.

Queríamos conseguir un efecto contrario a lo que transmite la frialdad de una fábrica y con ello hacer alegato a que no hay espacios malos, todo es transformable.

La herencia familiar nos permite estar en nuestro estudio trabajando y, si el cliente lo desea, poder adentrarnos en la fábrica para revisar su proyecto saliendo por una pequeña puerta que se conecta con la fábrica como si se tratase de Alicia en el País de las Maravillas cuando se adentra y sale de un robusto árbol.

La psicología y carácter de este espacio se basan las premisas permanentes del estudio. Un gran conocimiento del color, de la naturaleza y de cada pieza: mobiliario, obra pictórica, piedra, etc… que tiene un porqué.

Además de realizar un gran estudio del espacio, siempre buscamos puntos de fuga. La línea está muy presente en nuestro proyecto; juegos ópticos que nos permiten focalizar grandes espacios proporcionándonos limpieza visual.

Destacan las piezas de mobiliario. La última, una colección de seis piezas inspiradas en el mobiliario colonial inglés del siglo XIX están inspiradas en Karen Blixen, escritora danesa encargada de transformar y convivir en África en el siglo XIX. Y la última obra pictórica titulada «Luces sombras y naturaleza» inspirada en los nenúfares de Monet. Una metáfora para el ser humano «No habrá luz sin sombra y la propia naturaleza nos proporcionará la paz ansiada» como lo propuso Monet en una de sus cartas a sus colegas de profesión.

Además este pequeño oasis está concebido para compartir con otros diseñadores, artistas, interioristas dando cabida a la sinergia.